LA ANSIEDAD QUE PROVOCA EL #FOMO
El miedo social a perdernos todo lo que pasa.
Señales de que lo estamos sufriendo y pequeñas soluciones para olvidarnos de él.
Seguro que…como últimamente estáis en todo… y no os perdéis nada de nada… sabréis lo que es el FOMO….(ironía).
Son las siglas que corresponden con Fear Of Missing Out. La patología psicológica que se produce por el miedo a quedarse fuera del mundo tecnológico o a no desarrollarse al mismo ritmo que la tecnología.
¿Ein?
O lo que es lo mismo, miedo a “no saber de que va la vaina”, miedo a “estar out” del mundo, es un miedo a que te digan “que no te enteras”, es un miedo a estar “fuera de onda” y otros tantos sinónimos que vienen a decir que…
Nos asusta mucho perdernos cosas que los demás no se pierden.
Esa angustia y ansiedad que nos invade cuando vemos que todos conocen algo y nosotros no, tanto del ámbito online y offline. Un temor social que pensamos que nos puede llevar a la exclusión cuando no sabemos de qué se está hablando. Un sentimiento que crece y que provoca que estemos hiper-conectados en todos los sentidos, para no sentirnos fuerísima.
¿Qué esto no va con vosotras? Mirad a ver si de esta lista que hay a continuación os sentís identificadas con algo:
FOMO porque no estamos viajando a ese sitio que ha ido todo el mundo.
FOMO porque no hemos ido a ese restaurante al que todos van.
FOMO porque no habías visto esa foto de esa influencer que tanto mola y todos han dado like… (¿La gente da likes mientras duerme?).
FOMO porque no tenemos esa marca de ropa que todos llevan. (¿La pagan con likes?).
¿No has probado ese café que todos han probado? FOMO (Y eso que igual ni te gusta el café).
FOMO porque no has visto las series que hay que ver de todas esas plataformas de video on demand de las que te has hecho socia para no perderte nothing (¿La gente ve series mientras duerme?¿Cuándo ven todo?).
FOMO porque no has leído todos esos libros que todo el mundo lee (en serio, ¿la gente lee, ve series y stalkea mientras duerme?).
FOMO a no estar en esa fiesta un viernes que has decidido quedarte en casa. (Porque como no te quedes en casa no ves las series que ve todo el mundo…)
Ver la tele mientras usamos el móvil por miedo a no leer las últimas noticias, ver el telediario y enterarte de las conversaciones de Twitter: Eso es FOMO del bueno.
FO-MO-FO-MO-FO-MO-FO-MO-FO-MO: lo tenemos. Y podríamos seguir poniéndote más cosas en la lista hasta mañana.
¿Las redes sociales tienen algo que ver?
Sí, mucho. En ellas solo se cuenta lo bueno y nos lleva inevitablemente a la comparación que, inevitablemente, también nos provoca FOMO.
El problema es que la saturación de contenidos, medios y plataformas nos presenta más opciones de las que podemos abarcar. Por muy superwomans que seamos, es imposible estar a 20 cosas. Trollicientas redes sociales, trollicientas plataformas de noticias, trollicionetos planes, trollicientos platos que probar, trollicientas apps de todo…Trollipichucientas movidas que no nos da para “estar in” en todo. Perdemos el contacto con la realidad y nuestra cabecita llena de imaginación nos lleva a pensar que los demás están teniendo mejores experiencias y vidas que nosotros. ¿Qué tal si tiramos el móvil al retrete?
FOMO, qué palabra tan fea y cuanto protagonismo tiene en nuestras vidas.
Lo primero que tenemos que hacer es aprender a reconocerlo y evitarlo. Después, se nos ocurren algunos hábitos que podemos empezar a adoptar en nuestra rutina para dar pasitos y calmar un poco esa sensación que provocan esas cuatro letras
1. Olvídate del móvil en situaciones importantes:
Por fin has cuadrado esa reunión imposible de trabajo, pro fin se han alineado los astros para que os juntéis toda la pandilla, por fin te ha invitado a una cita esa persona a la que le tienes ganísimas, por fin llegas a casa después de un día de mierda y… simplemente no puedes evitarlo…¿ estas mirando el móvil? Tíralo por la ventana. En esos momentos más que nunca, no lo mires, apágalo y entiérralo bajo tierra.
2. Establece unos horarios:
Si no puedes dejar de mirar el teléfono, al menos establece unos horarios. Nada de lo que pasa en ese dispositivo y de los avisos que llegan son tan urgentes (la mayoría de las veces). La impaciencia por contestar un mail, un mensaje, un comentario, refresh noticias… no corre tanta prisa. Seguro que si el mundo se va a la mierda te enterarás de otra forma.
3. Bad News, siempre vas a perderte algo.
No podemos vivir cientos de vidas a la vez. Cuanto antes lo asumas mejor. En esta vida siempre nos perdemos algo a no ser que nos multipliquemos. Y eso de momento solo pasa en las películitas. Si has elegido un concierto supone que te estás perdiendo otros 10. Elegir un plan, es perderse otros mil planes y así pasa con todo. Lo que tenemos que hacer es que cada vez que elijamos algo, dejar de pensar qué estás haciendo “en-lugar-de”. Así pararemos la frustración que nos reconcome.
4. Good News, importa más lo que estas disfrutando que lo que te estás perdiendo.
Tenemos que empezar a hacer hincapié en las cosas que estamos disfrutando y dejar de pensar que otros disfrutan más que nosotras. Sea cual sea lo que elijas, estará bien elegido. Ya sea quedarte en pijama, elegir ver una peli en vez de otra, salir a hacer deporte en vez de pegarte el fiestón…pegarte el fiestón en vez de…(el sentimiento de resaca-frustración no entra en este post jajaja). Da igual lo que sea, solo valóralo. No nos angustiemos por lo que no hacemos y focalicemos en lo que sí.
5. ¡Spoiler! Nada de lo que reluce en Instragram es maravilloso.
No nos cansamos de decíroslo. Nadie enseña las discusiones de pareja en IG, ni las gastroenteritis, ni las lentejas que se quemaron, ni las mierdas de su trabajo, ni cuando su viaje no es tan instagrameable, ni el “what a mess” real de su casa desordenada, ni el gato vomitando bolas de pelo, ni los problemas familiares…¿seguimos? Así que como nadie lo cuenta todo, no sabemos la verdad. Por lo que no debemos dejar que nos condicione tanto.
Y…hagamos un ejercicio de autoestima, cuestionemos esa “realidad” falsísima, disfrutemos de nuestras cosas no las de los demás, consumamos más vida y menos digital y no nos perdamos lo que nos pasa a nosotras por estar pendientes de lo que les pasa a gente que ni conocemos. No es fácil, pero como todo en Girly, paso a paso.
Que la fuerza de Baby Yoda os acompañe con el #FOMO.
Cristina Valbuena y Cristina Alonso.
