WEST COAST ROAD TRIP. CAP I. OREGÓN
Este verano ha sido genial, hemos hecho miles de cosas, pero sobre todo hemos hecho EL VIAJE. LLevábamos tantos años soñando con recorrer la Costa Oeste de Estados Unidos en coche que casi no podíamos creer que fuera a hacerse realidad. La verdad es que había muchas opciones y aunque el clásico recorrido por la Ruta 66 nos tentaba mucho, al final pesaron más las ganas de playa y decidimos recorrer la Costa de norte a sur, toma ya. La intención inicial era ir de Seattle a San Diego, pero solo teníamos 15 dias y no queríamos ir corriendo sin tener tiempo a disfrutar los lugares, así que la acortamos y finalmente la cosa quedó en: From Portland to L.A.
Como estuvimos en muchos sitios molones y os queremos contar todos, vamos a dividir en post en varios capítulos. Aquí va el primero: Portland y la costa de Oregón.
PORTLAND
Lo más guay de esta ciudad es decirla seguida del estado, es decir "Portland, Oregón", es lo que tiene haber escuchado mil veces las cosas. La verdad sea dicha que nos empezó a insteresar a raíz de la serie Portlandia, necesitábamos saber si la gente más hipster del mundo vivía ahí y meternos en su mundo un par de días. 48 h en la ciudad nos valieron para patear el centro y algún que otro barrio de arriba a abajo (no llegamos a necesitar uber ni coche) y hacer check en casi toda la lista de tips que llevábamos en nuestro mapa. Aquí os chivamos los que más nos gustaron:
Voodoo Doughnut
El primer sitio al que fuimos nada más salir del hostel fue a Voodoo Doughnut. A ver, cajas rosas, donut en forma de muñeco de vudú con mermelada que simula sangre, donut de bacon... lo de las cajas rosas ya lo dijimos, no? Pues eso. Id.
Stumptown Coffee Roasters
Como no solo de bollos vivimos, nuestro cuerpo y nuestro jetlag nos pedían un buen café. La verdad es que la ciudad está llena de cafés de baristas con perilla y gorro, todos tatuados, haciendo espigas con la espuma de la leche, así que no te será dificíl encontrar un café decente. A nosotras nos flipó este, además estaba lleno de bomberos desayunando, je.
Figlia Americana
Al otro lado del río y también con una puerta rosa se encuentra este restaurante/ bar/ tienda de muebles antiguos super moderno y donde puedes tomar vino rosado en lata (la lata más bonita del mundo) y un buen bocata de porchetta.
Raverly
Este coreano es perfecto si quieres darte un capricho para cenar (no es que sea mega caro, pero unos 40 por persona). El trato es genial y a pesar de una carta muy pequeña está todo buenísimo, a destacar su pollo frito, del que chuparás hasta el plato.
Taquería Portland
Quien te haya dicho que en Estados Unidos no se come por menos de 30 pavos, te ha mentido. Nosotras encontramos un montón de sitios en los que comimos por 10$ persona. Eso sí, hay que currarselo un poco, llevar sitios buscados y no dejarte tentar por la primera cucada atrapa guiris que veas. Esta taquería hace unos burritos y tacos de muerte a precios de risa.
Sizzle Pie
Un buen trozo de pizza americana para coger fuerzas y seguir? Nosotras probamos la de peperonni de Sizzle Pie, buena, bonita y barata.
Salt & Straw
Por nada del mundo se te olvide pasarte por esta heladería. También la hay en SF y LA. La renocerás porque la cola sale unos metros del umbral de la puerta. El mejor helado de caramelo salado del planeta. Los otros sabores también nos fliparon y los cucuruchos tamaño bigbigbig size, un sueño. En la misma calle (NW 23rd av) hay un montón de tiendecitas, bares y casas molonas.
Powells City of Books
Un lugareño nos dijo que esta era la tienda de libros más grande del mundo. No sabemos si es verdad, pero molar mola un montón. Está dividida en secciones por temática y tiene todo lo que te puedas imaginar. Además es tranquila y tiene bancos para sentarte a leer o echar un ojo a lo que más te interese. Salimos cargadas.
Everyday Music
Las amantes de la música en discos de vinilo pueden ir preparadas para echar aquí toda la mañana y salir cargadas de tesoros. Pasillos y pasillos de música y rarezas donde quemar la tarjeta.
Hattie's Vintage
Esta tienda es pequeña pero tiene una buena selección de prendas vintage en buen estado. Otras por la zoa son Magpie, Hollywood vintage o Avant Garden.
HI Portland Northwest Hostel
Nos encantó nuestro hostel en la ciudad. Súper barato, súper limpio y majísimos. Estábamos en una casa rollo las de las series americanas de toda la vida, con sus escaleras, porsche y todo eso... Además de desayunar había bagels, Yummy.
EUGENE
La siguiente parada en nuestro viaje fue este pequeño pueblo interior del estado de Oregón. Lo ideal hubiera sido ir directamente hacia la costa, pero no necesitábamos atajar un poco por falta de tiempo. Si no es vuestro caso, Cannon Beach es un buen spot que teníamos fichado y al fina no pudimos catar. Estuvimos muy poco tiempo en Eugene pero nos dió tiempo a fichar un par de lugares, por si haces noche allí:
Falling sky Brewing
Es difícil pasear por la costa oeste y no acabar con una cerveza artesana en la mano, nos dimos cuenta nada más llegar. Esta pequeña fábrica local tiene un restaurante en la parte trasera con terraza donde hacen un pulled pork y unas burgers de muerte.
Slightly Coffee Roasters
Desayuno healthy y buen café en este bar monísimo y lleno de luz. Tranquila si te recuerdan a los del café Federal y sientes que es más de lo mismo, cuando estés en plena carretera con gofres, bacon y café aguado ya echarás de menos el aguacate, ya...
BANDON
Y zumbando salimos para ver el mar, nuestra primera parada costera fue Bandon, un pueblecito de pescadores donde comer uno de los sándwiches de langosta más famosos de la costa y seguir hasta pillar la Nacional 1 para contemplar el pacífico en todo su esplendor, mientras suena un temazo en tu coche.
Tony's Crab Shack
Hay que hacer cola, tener paciencia para encontrar sitio y barato no es, pero compensa su rollo super auténtico y que luego está buenísimo. A nosotras en concreto nos gustó más el de gambas y cangrejo con queso, pero el de langosta hay que probarlo.
REDWOOD NATIONAL STATE PARK
Seguimos nuestro camino hacia California atravesando una de las partes más al norte del parque nacional Reedwood. Es bastante indescriptible la sensación al estar entre esos gigantescos árboles y el inmenso silencio... simplemente parad y disfrutad.
Y de momento esto es todo, pronto seguimos con el segundo capítulo: Costa Norte de California y San Francisco. Yeahhhhh.
Cristina Alonso y Cristina Valbuena.