VIDRIO, PAPEL DE FILTRO Y AGUA. NADA MÁS
CHEMEX
Hoy, lunes, hemos querido empezar la semana con lo único que nos motiva a arrancarnos el pijama cuando suena el despertador: El café.
Un hecho: cada vez se toma más café que gin tonics. Sí. El boom después del pan y la cerveza artesana. Y es que, con eso de que ahora nos conquista más la luz del día, que los neones de la noche, hemos encontrado en el café, el refugio de su cafeína. Nos acompaña todas las horas de sol con su aroma y la sacudida de su sabor: la fuente de la energía eterna.
En cada rincón de la ciudad hay un coffee corner, como si de un dealer se tratara. La droga más legal, ahora la puedes disfrutar en cada esquina. Los baristas escondidos han salido a sus mostradores, y los que no lo eran, han aprendido su ceremonia.
Hemos vuelto a la verdadera cultura del café. El café de tercera generación. No el de “un con leche marchando”, sino, en el que "voy a invertir mi tiempo", para que de verdad disfrutes el momento. Café recogido a mano, seleccionado, tostado, envasado y mimado hasta el goteo en la taza. Cada vez es más fácil encontrar un café bueno por la ciudad. Gracias Dios ( el que sea que nos cuide).
De frecuentar tanto estos enclaves del conocimiento cafetero, a nosotras ya nos ha picado el gusanillo de probar a elaborar en nuestra casa estas recetas mágicas de la infusión más extendida de la historia.
Nuestra cocina durante este último año, ha crecido en el número de cacharritos cafeteros. Más que unos fogones ahora parece un laboratorio. Pero todo sea por que ese sorbito, que das al café cuando más lo necesitas, sea celestial.
Hoy os presentamos Chemex, la que es considerada la mejor cafetera de filtro y un modelo único de diseño de producto.
Una elegante y tradicional pieza de vidrio de los años 40, con forma de reloj de arena, que lleva un detalle para agarrarla en madera pulida con cordones de cuero. Nada más y nada menos que un diseño que tiene su hueco en el Moma de NY y premiada infinidad de veces.
El café se filtra a una justa velocidad como para mantener las cualidades óptimas de su sabor, restando el máximo de amargor. Aquí os dejamos nuestras chuletas manchadas de café con los pasos para prepararlo.
Pero no te tires a la piscina sin antes comprar una buena materia prima. ¿Dónde? Te dejamos una lista de nuestros sitios favoritos de Madrid, donde poder comprar los utensilios y un paquetito del origen que más te guste y vendido por una gente muy maja. Además podrás descubrir también los cursos que en algunos de ellos imparten, en los que compartirán contigo sus técnicas para que los granos de café de tu casa no produzcan solo un dolor de tripa.
Dos tazas, sin azúcar por favor.
Cristina Valbuena y Cristina Alonso.
