HEY RAMEN GIRLS!
Los mejores sitios donde comer ラーメン
Sabemos que el mejor ramen del planeta, obviamente, se come en Japón. También sabemos que Japón está a unos 10.768,31km. de la península, y que no pilla especialmente a mano ese día que se te antoja comerte un bol calentito de este manjar nipón. Por eso, en nuestro afán por buscar esos rincones donde poder comerlo cuando nos apetezca, os dejamos nuestros favoritísimos de Madrid y Barcelona para enfundarse los palillos y sorber, sorber, sorber, hasta que no quede un fideo en el cuenco.
Barcelona
Ya-Hiro
El ramen más popular de Barcelona y el que primero puso este caldo en el fogón en la ciudad. Un espacio que nos recuerda a la típica barra japonesa de verdad, donde sentarse a esperar con una cerveza en la mano que te sirvan un pozo enorme de shoyu o miso ramen.
Koku Kitchen
Escondido entre las callejuelas del Gótico, en sus cuencos humea un caldo japonés denso, sabroso y potente. Power ramen. Y aunque su cocinero es irlandés, no tiene nada que envidiar a uno japonés. Tiene pillada la receta perfecta de este plato. Si pasas por su puerta no dudes en entrar.
Fan Shoronpo
Keita Tanaka, su cocinero, prepara un ramen que resucitaría a un samurái. Además no puedes no pedir sus famosos Shorompo, un tipo de dumplings. El dúo perfecto para pasar una velada “piqui piqui” con los palillos, fideo por allí, dumpling por allá.
Dining Yu
Su fantástica sopa se disputa el podio entre los mejores, porque en su barra encontrarás unos fideos flotando en un fantástico caldo muy muy muy parecido al que te comes en el otro lado del mundo. Mola mucho porque puedes ver cómo sus chefs japoneses preparan todo con mucho mimo.
Madrid
Hanakura Kagura
En esas frías noches del invierno madrileño, lo único que te salva no es un cocido, ni un chocolate con churros: Es el Ramen Kagura. Un sitio muy sencillo a simple vista, pero en el que se cuece, a fuego muy lento, uno de nuestros ramen favoritos de la ciudad. Esa clase de ramen que cuando se te acaba solo piensas en rebobinar para volver a comértelo.
Yokaloka
Entras en un mercado de abastos de toda la vida, en el de Antón Martín, en el que los puestos se han reconvertido en pequeños restaurantes, cada cual más tesorito gastronómico. Yokaloka es un puestecito japonés pequeño, bonito, de calidad y barato, que al estar en este mercado nos recuerda mucho a los que visitamos en nuestro viaje a Tokio y Kioto. Su especialidad es tonkotsu râmen hecho lentamente, como manda la tradición.
Morikaen 森加森
Este restaurante escondido en la zona de Argüelles, tiene en su carta un montón de platos japoneses. Su cocinero, que se ha traído de la isla nipona, su mejor cuaderno de recetas, prepara un ramen en un cuenco más grande que nuestra cabeza. Puedes elegir 16 tipos de caldos en los que mojar sus infinitos fideos. Una maravilla sorber entre sus vapores. Como todo lo de la carta es genial, no pedirás solo el ramen… prepárate para salir inflado como una gyoza.
Shifu
Nos trae mucha morriña nipona. Su neón rojo atrae para que entres a pescar en su caldo. Cuando sumerges tu cabeza en el cuenco, te vas directo a la isla pacífica. Nueve variedades y una que añaden de manera esporádica que te convertirán en un auténtico adicto.
En nuestra eterna historia de amor con esta sopa milenaria, os dejamos un tip que nos dieron en el imperio del sol naciente: el ramen está más rico si se sorbe. No tengas vergüenza. Verdad de la buena.
Cristina Valbuena y Cristina Alonso